lunes, 30 de noviembre de 2009

SOLO UN CAFE...



Y como siempre llegas tarde,
La puntualidad nunca te marco los encuentros.
¿recuerdas?
(Pero entre besos y abrazos de sobra sabias recuperar el tiempo perdido),
En verdad como hemos cambiado...
Y aquí estamos después de tantos años,
Solo nuestros nombres siguen intactos...
No me avergüenza decirte que esta década de separación
mas de una vez se alimento con el anhelo de este momento,
Me pregunte (y hasta tengo anotadas las distintas respuestas)
que habrá sido de tu vida, junto a quien dormirías,
cuantos besos por día te permitías ( solías decirme “una cantidad mínima, para no generar adicción”.
He soñado con tu cara, he comprado tu perfume, he pronunciado tu nombre en silencio,
Me he tatuado tu inicial, y me arrepentí un millar de veces, porque solo logre hacer visible el amor que te tenia marcado a fuego...
Y he deseado saber, cual si fuera la respuesta a la pregunta existencial, sí alguna vez me
recordaste.
Como en aquella canción, millares de veces creí ver tu rostro entre la gente, y al descubrir que no eran tus ojos, que no olían a tu perfume (aquel que me hechizaba)
juraba que algún día, no se como ni cuando, te hallaría. Y a pesar de los años sabría reconocerte...
No te rías...
Ya ves sigo hablando mucho, mis nervios no conocen de silencios..
Dicen que para hacer realidad un sueño, solo basta con desearlo profundamente,
no solo con el corazón sino hasta con el alma...
Y aquí estamos... Tras tantos años...
La vida se encargo de reencontrarnos,
de regalarnos nuevamente las charlas interminables,
el decirnos todo, como solo lo hacen los buenos amigos...
Como de costumbre, apostaste a mas...
la cita en este, nuestro viejo lugar...
donde te habrás dado cuenta que “nuestro café” aun no lleva nuestros nombres
( como me prometiste)
Y, como aquella primera vez, llore
Nuevamente el desear con el alma daba resultados...
Me temblaban las piernas, me sudaban las manos,
se repetía con exactitud estremecedora cada uno de los pasos.
Como preparando un ritual, elegí la mejor ropa ( recuerdo tus colores preferidos)
Me volví a comprar “tu perfume” ( el que solo me dejabas usar cuando nos veíamos)
No dormí esperando este momento...
Si, si ya lo sé...ya no soy aquella adolescente, no sonrías...
Y así salí al encuentro, con mucho miedo, con los años a cuesta, con la vida a rastras...
Y como de costumbre llegue antes, bendito el momento que me hizo recordar que hay cosas que no cambian...
Este Deja Vu me devolvió casi de un golpe diez años atrás, me recordó una a una las lágrimas derramadas, el vacío desgarrador en el que cayó mi alma, cuando un día lluvioso como hoy, en este lugar me quede sola esperando tu llegada...
Todavía retumban sus palabras, hoy al salir de casa..”Estas Hermosa, me llevo tu perfume en mi piel”...
Me besó y se fue....
Y otra vez, como si tuviera un mágico radar, diez años después, me rescato de las garras del dolor, y sigue amándome como lo juró, “ Hasta que esa inicial se borre de tu alma, y solo sea una letra mas dibujada”...
Vine...No falte a la cita...
(ya no tomo café)
Aquí te dejo mis palabras...
Hay cosas que no cambian, hay personas que el tiempo las mantiene intacta...
Gracias...
Otra vez...llegaste Tarde...